‘Seré un presidente previsible…’

 marianorajoy0.jpg

1. ‘Seré un presidente previsible, patriota, independiente, moderado y resolutivo’

Leo las dos partes de la interviú que Pedro Jota Ramírez le hace a Mariano Rajoy en El Mundo. La verdad es que, como en el caso de Rodríguez Zapatero, el formato beneficia al entrevistado: sale bien parado, quiero decir. Hay que ser muy sectario para no aceptar que la interviú extensa facilita la argumentación, la racionalización: ese modo de exposición en el que las preguntas y las repreguntas permiten matices… Cada vez me gusta más la literatura política (literatura política, insisto). Esto es: las declaraciones, los libros-entrevista, los volúmenes confeccionados para lucimiento del candidato. Descubres cosas imprevisibles, el punctum del retrato (que diría Roland Barthes). Estoy leyendo el libro de Barak Obama, La audacia de la esperanza, que me prestó Francisco Fuster. Me entretiene tanto…, que me he  comprado mi ejemplar para poder subrayarlo, anotarlo, corregirlo: para poder interpelarlo en el margen; para poder comentarlo aquí próximamente. He de hacer lo mismo con el volumen cuyo protagonista es Mariano Rajoy: Si yo fuera presidente, del que son autores Pablo A. Iglesias y María Jesús Güemes. Pero, de momento, dejo el libro dedicado a Rajoy (ya volveré sobre él) para centrarme en la entrevista de Pedro Jota.

Me parece muy interesante el titular que El Mundo dedica a Mariano Rajoy en la primera plana del lunes 28 de enero: «Seré un presidente previsible, patriota, independiente, moderado y resolutivo«. Es una frase muy inteligente que, como tal, no aparece en la entrevista. Es un titular de copypaste, hecho de retales para así abreviar la larga declaración. «Defíname en sólo cinco atributos cómo gobernará usted si llega a La Moncloa», pregunta Pedro Jota. «Primero y fundamental: seré previsible», contesta Rajoy. «Independiente. Lo único que condicionará mis decisiones será el interés general», añade el candidato. «Patriota, en el buen sentido de la expresión. Luego, moderado. Y, por último, capaz de actuar con determinación. O sea, resolutivo», concluye.

El titular que sintetiza es bello pero no compromete gran cosa. Verán: no conozco a ningún candidato que presumiblemente pueda triunfar diciendo de sí mismo que será un presidente imprevisible, antipatriota, dependiente, extremado e dubitativo. Hagan la prueba y lean la oración así, en esos términos: al revés.

Equilibrismo (martes 29 de enero)

En realidad, lo más interesante de la entrevista es el equilibrismo verbal a que Mariano Rajoy se ve obligado, el empeño que ha de poner para enjuiciar positivamente a los suyos sin disgustarlos, siendo a la vez fuerzas centrífugas y hasta opuestas. El líder del PP reprocha a Rodríguez Zapatero lo que juzga su pactismo débil: la necesidad a que se ve forzado de acordar y convenir con diferentes actores políticos que amenazan con disolver lo común. Si nos fijamos bien, eso mismo es lo que Rajoy ha de hacer en el seno de su propia coalición. Digo bien: coalición. El Partido Popular y su entorno son una colusión de intereses (perfectamente legítima), pero una colusión que con frecuencia es colisión de contrarios. Para apoyar al líder, pero también para obtener réditos futuros y para resarcirse, muchos de esos actores han forzado y extremado la posición de Rajoy, avinagrando su estilo de oposición y el tremendismo. Eso se ha notado hasta en el gesto o el ademán con que se fotografía. Recuerdo imágenes antiguas de Rajoy en las que el retrato nos devolvía a un tipo de aspecto socarrón, relajado, dispuesto a fumarse un enorme cigarro. Veo las fotos de hoy en día y su rostro siempre parece esbozar una sonrisa incipiente y algo amarga, casi una mueca. ¿Se puede hacer crítica política con estos detalles secundarios? Por supuesto que no, pero la impresión de lo que el espectador ve es probablemente más decisiva que una extensísima entrevista que nadie completa para después votar. En ella, el personaje parece sincerarse admitiendo incluso algunos excesos verbales vertidos contra Rodríguez Zapatero (bobo solemne, etcétera). Pero inmediatamente lo vemos recomponer su figura ante los suyos (imaginamos) para reprochar que fue el otro quien empezó. En todo caso, la imagen más significativa de todas las que ilustran la entrevista no es la de un Rajoy flanqueado por Pedro Jota, alguien que representa su condición de Mr Everyman viajando en metro o transitando a pie de calle, sino aquella otra con la que empezábamos este post: de noche, un candidato solo (muy bien iluminado), con Santiago al fondo. Un fondo aún incierto. Imprevisible.

—————–

2. Apéndice documental

Segunda parte de la entrevista (síntesis)

Primera parte de la entrevista (síntesis)

Vídeo de la entrevista (aquí)

—————–

3.  Hemeroteca JS

Todo un personaje«, El País, 25 de enero de 2008

Tres autorretratos de Aznar«, Claves de razón práctica, núm. 179 (enero/febrero de 2008)

————–

 NUEVO POST, JUEVES 31 POR LA TARDE.

AVISO: RETRASADA LA PUBLICACION DEL NUEVO POST HASTA EL VIERNES 1 DE FEBRERO AL MEDIODÍA. ESPERO CUMPLIR.

46 comentarios

  1. ¡Qué estómago el suyo, don Justo!… ¡qué valor!…

    Y que cara de panoli tiene don Mariano en esa foto que reproduce. Desde luego, el sr. Rajoy, previsible lo es hasta la saciedad; patriota, innegablemente, se nos ofrece como un paradigmático nacionalista español; independiente… ¿de quién, de qué? ¡que manía tiene este caballero con usar ese concepto! si, como mínimo, es militante de un partido, creyente de una religión y miembro de una comunidad de vecinos, ¿de quién, de qué, su independencia?; moderado, desde luego, no, sus posicionamientos intransigentes y extremistas así lo corroboran; y, vamos, lo de resolutivo… si resolutivo es hablar del chapapote como aquellos “hilillos de plastelina” que salían a borbotones mientras él esperaba que “el jefe” dijera algo para él acatarlo y sólo entonces vocearlo o resolver el asunto Gallardón-Aguirre como lo hizo, con unas formas que oscilaban entre lo pusilánime y lo tabernario… en fin… vaya tipo “si el fuera presidente”…

  2. Lo siento, muy señor mío, coincido con el señor Kant y con usted, as usual, y tabién con la abuelita de don Arnàu, pero a mí este señor se me aparece en sueños entre la bruma de un parque, cerca de los columpios o a la salida de un colegio, con el gabán entreabierto, acariciando su barba rijosa…

  3. ¡¡¡¡Dios, mío, éstas rusas!!!! Difiero un poco, a mí me recuerda, con sus pies planos y su aire obsequioso algo babosuelo, a un empleado con batón gris o blanco de antigua tienda de ultramarinos o abacería, coloniales más bien, como se llamaban en tiempos… Intentando quedarse con algo del cambio.

  4. Sra markova está mu feo eso que dice de este señor en un parque! Lo del gabán y la barba rijosa. Esa es la critica que hacen las izquierdas?

  5. ¡Hala! como nos hemos despachado con el pobre don Mariano (y yo el primero), pero, no obstante, creo que por una vez Paco tiene razón y una vez resuelto el estallido de descalificativos anecdóticos, valdría la pena adentrarse en las claves que don Justo nos propone. Por ser sintético, leo en el sr. Serna una realidad de partido y una incapacidad personal. Me explico.

    En la primera mitad de los 90 del pasado siglo, con la refundación del PP, se quiso reeditar el éxito de la UCD por la vía que condujo al éxito a ésta: aunar los esfuerzos de la derecha dispersa dentro de un discurso moderado y europeo para crear una “derecha civilizada” en España asimilable a la que uno puede encontrar en las grandes democracias europeas. Sin lugar a dudas el nuevo PP lo consiguió, llegó al poder. En sus primeras elecciones ofreció una imagen de unidad de partido, pacto como relación política, modernidad para la sociedad y europeidad como espejo en el que reflejarse que confirmó, a lo largo de su gestión en una primera legislatura (esa en la que el sr. Aznar hablaba catalán en la intimidad de su hogar), aquella imagen, aquella máscara. Con esos mimbres, la “derecha cavernícola”, la carca, parecía que había desaparecido del paisaje español. Así, la segunda legislatura la ganó el PP con mayoría absoluta. Y en ella se mantuvo en intención de voto hasta finalizar el verano del segundo año del segundo mandato del presidente Aznar. Aquel fue un verano de frenazo y vuelta atrás.

    Hubo caída de máscara y se vio el rostro que ocultaba, el de los de siempre: la “derechona”: financieros rapaces y sin escrúpulos campando a sus anchas, muertos de hambre encaramados al poder para medrar en él, la peor Iglesia católica bramando sin pudor, el criptofascismo sin domeñar atemorizando en las calles (homofobia, racismo, patrioterismo, antifeminismo…). Con ello, se explicitó la “agenda oculta”, la intención real de su gobierno: pusilanimidad en política internacional (con el giro copernicano para caer en los brazos de los EEUU), enfrentamiento en política interior (se dio fin al pactismo que había informado la Transición), desbarajuste económico para que los pescadores de siempre pescasen en río revuelto, descrédito de la Administración Pública para facilitar las privatizaciones, retorno de los disparates católicos (abstinencia sexual, ataque a la ciencia, menosprecio a la familia, fanatismo…)… en fin, justo lo que no quería el soberano. Como la trufa de aquello fueron las mentiras de la guerra de Iraq, lo más lógico fue lo que pasó: perdieron las elecciones.

    Con aquella derrota el efecto UCD también se reprodujo en el PP y las fuerzas aliadas (liberales, democratacristianos, conservadores, franquistas, neofascistas… con todas sus familias, grupos y grupetes internos) comenzaron a sentir la tentación centrífuga. Sólo el liderazgo del ciudadano Aznar mantuvo esa unidad en base a (1) su propio empeño personal, (2) los principios ideológicos emanados por FAES y (3) una apuesta suicida: desarrollar una política de oposición extremista (un recomendación goebeliana, por cierto) para recuperar el poder a las siguientes elecciones si no antes. Para ello necesitaba un cabeza de cartel títere, sin personalidad reseñable más allá de algún detalle simpático, dócil al partido, sumiso al jefe… el sr. Rajoy daba el perfil… ¿daba el perfil? En aquellos momentos, 2004, la personalidad del sr. Aznar ya estaba lo suficientemente enrarecida como para llegar al punto de su propio convencimiento de estar revestido con el don de la infalibilidad (“el jefe nunca no se equivoca”), algo que sus áulicos pelotas no le iban a contrariar, y si él había decidido que don Mariano era la persona adecuada, nada más había que hablar. Como, además, don Mariano no parece adornado con la capacidad de discernir sus propias cualidades de sus debilidades, cómo no, aceptó.

    Sabemos, porque lo hemos visto, que el sr. Rajoy ha sido incapaz de llevar adelante su misión. Aceves y Zaplana han tenido que adoptar el papel duro que le correspondía a él. La única vez que ha impuesto “su” autoridad ha sido para lesionar los intereses de su propio partido: el caso Gallardón. Las elecciones no ha logrado adelantarlas. No ha desgastado al presidente Rodríguez. Y el PP llega a las mismas como una olla a presión a fuego vivo. En estas elecciones veremos que pasa con ese proyecto aznariano al que su propio promotor sólo le ha dado una alternativa: ganar. Todo lo que no sea eso… mmm… alguien tendrá que dar muchas explicaciones… y no será don Mariano.

  6. Agradezco al sr. Kant el detallado, el inteligente análisis para el que a mí me ha faltado aliento y sutileza…, y ello lo digo reconociendo que no todo lo que sostiene sobre el PP y el señor Aznar lo comparto. Hoy me falta fuelle.

  7. A mi estos cuatro calificativos que usa Rajoy para definirse me parecen como él mismo diría, muy previsibles. De hecho, son más o menos los mismos que viene usando últimamente, junto con esa apelación suya al «sentido común». He buceado en los anteriores «posts» sobre el tema y en uno del 28 de octubre de 2007 titulado precisamente «Mariano Rajoy» (http://blogs.epi.es/jserna/2007/10/28/mariano-rajoy/#comments) defínia la personalidad de Rajoy de esta forma (y perdón por citarme a mi mismo pero ahora lo aclaro):

    «Los rasgos de esta personalidad son claros, y se definen la mayoría de las veces, por oposición a Zapatero. En el discurso de Rajoy, Zapatero representa lo inconcreto, la frivolidad, la inconsistencia, lo provisional y extremado, la falta de criterio y de decisión, la “quintaesencia del radicalismo” (como dice Rajoy) en definitiva. Frente a esto, frente a esa imagen de dirigente folclórico y exótico, Rajoy aparece como abanderado del “sentido común”, ese sentido que ha perdido por completo Zapatero. Rajoy quiere abandonar ese “galleguismo” y muderlo por imagen de seriedad, recititud, moderación, seguridad, sensatez y equilibrio.»

    Como ven, no iba muy desencaminado. El titular de la entrevista de Rajoy en «El Mundo» no viene más que a confirmar esta idea de defensa de unos valores opuestos a los de Zapatero. Rajoy se presenta con cinco adjetivos nada aleatorios:

    1.- «previsible»: en vez de usar este adjetivo como algo peyorativo, Rajoy le da la vuelta y le confiere un valor positivo. Lo previsible es lo natural, lo lógico y lo evidente, lo que él representa en contraposición a Zapatero, que es lo imprevisible, lo frágil e improvisado; Zapatero no tiene ningun plan establecido, gobierna sobre la marcha según Rajoy, a base de «ocurrencias» (ahora les ha dado por esta palabra).

    2.- «patriota»: Rajoy representa los valores esenciales de lo español, el patriotismo y la família, la bandera y el modelo de Estado constitucional y monárquico. En cambio, Zapatero gobierna «de espaldas a los españoles», más pendiente de la periferia que del centro.

    3.- «independiente»: dice nuestro amigo Kant que no sabe de quién es independiente Rajoy. Yo tampoco, pero imagino que se califica de independiente porque en su cosmovisión del gobierno, Zapatero es dependiente. Depende de terceros y se vende a cualquiera. Es capaz de negociar con los nacionalistas (el caso más evidente de la legislatura sería quizá el Estatuto catalán) e incluso de intentar negociar con ETA. Por eso, el defiende su independencia y su criterio. Su partido está por encima del bien y del mal y no depende de nadie, no debe rendir cuentas a nadie.

    4.- «moderado»: como digo en la cita que he puesto del post de octubre, la moderación de Rajoy es el sentido común. Frente a la radicalidad y las excentricidades de Zapatero y su gobierno, el PP quiere transmitir la imagen de moderación y mesura, de cordura en definitiva. Ellos quieren gobernar de forma previsible y moderada, sin estridencias; haciendo simplemente lo que es natural, lo que haríamos todos por ser lo que más conviene al conjunto de los españoles. Todo lo que se salga de ahí es la demencia y la falta de criterio.

    5.- «resolutivo»: evidentemente, frente a esas «ocurrencias» y vaivenes de Zapatero, el gobierno popular sera resolutivo y contundente. No dirá las cosas a medias. Nada de «talante» ni entelequias varias; hay que ir al grano del asunto, hay que primar la praxis sobre la teoria.

    Supongo que ya hablaremos más adelante, pero muchas de estas cosas, muchos de estos adjetivos, son fácilmente extrapolables a lo que está ocurriendo estos días en Estados Unidos. Aunque allí todo es mucho más complejo, el libro del señor Obama al que se refiere Justo contiene muchos pasajes sobre la política norteamericana actual, que describen situaciones que no distan mucho de algunas que hemos vivido más de cerca con socialistas y populares.

  8. Exacto. Gracias Kant por el análisis político, elegante y argumentado como siempre. En cuanto al aspecto humano del quidam, me atengo a lo dicho —también por usted con otras palabras—: el perfecto «dependiente» de tienda antigua de paños y tejidos o coloniales, que es lo que vende en el fondo el PP, una ideología trasnochada, no conservadora sino profundamente reaccionaria, ni siquiera «neo» como les gustaría a ellos aparecerse. Véanse sus reacciones y comentarios al caso del Hospital de Leganés como última muestra, por si hicieran fata más.
    A mi me fata fuelle, como a don Justo, para reflexionar a fondo sobre estos señores; a estas alturas prefiero ignorarlos, cambiarme de acera para no toparme con ellos… si es posible. Como decía Forges en una de sus prodigiosas metáforas, están por doquier: Marido de dice a esposa, «enciende la tele», «¡No, que salen!», responde ella.

  9. Caramba, don Justo, independientemente de agradecerle sus palabras, reconózcame que si no discrepáramos esto sería aburridísimo. Así que, recupere aire para apostillarme. No obstante, también advierto que la limitación que me he impuesto para moderar mi salvaje incontinencia verbal hace que en ocasiones, por ser sucinto, algunas cosas las simplifique en exceso o las presente de una forma que, leída con mesura – actitud que no tengo a la hora de escribir –, no llega a reflejar exactamente el propósito de mi oración.

    Ahora, si me permiten, haré una pequeña reflexión gramatical que viene al caso del ambiente político que hemos vivido estos cuatro últimos años. El señor Fuster entrecomilla, y hace bien, la expresión “talante”. Ahora que acaba la legislatura donde esa palabra ha tenido tanto éxito mediático me voy a dar el placer (vulgo, gustazo) de reproducir “in extenso” lo que significa según el Tumbaburros (o sea, el DRAE)

    Del ár. hisp. “tál‘a”, y este del ár. clás. “tal‘ah”, aspecto, infl. por semblante. 1. m. Modo o manera de ejecutar algo. 2. m. Semblante o disposición personal. 3. m. Estado o calidad de algo. 4. m. Voluntad, deseo, gusto.

    En otra palabras, NO tiene ninguna connotación de bonhomía, ni debilidad, ni de candidez, ni pactismo, ni derrotismo, ni ninguna de las sandeces que políticos y periodistas han entendido. ¿Recuerdan esas frases del tipo “¡hay que acabar con el talante!” o ideas como la que el sr. Fuster atribuye justamente al universo conservador español: “Nada de “talante” ni entelequias varias; hay que ir al grano del asunto (…)”… ¿Cómo se va a acabar con el talante, zotes?. Se podrá, en todo caso, “cambiar de talante” pero no hacerlo “desaparecer”, aunque sea, sencillamente, porque esa palabra se limita a mostrar una actitud sin valorarla, por lo tanto, lo que expresa la derecha es, precisamente, una muestra de otro… talante.

    Lo significativo del detalle, de la anécdota, es la demostración categórica de la ignorancia de quien usa mal la palabra. No entraré en el penoso asunto de los periodistas que no saben, ya no escribir, es que ni hablar, ni siquiera el significado de las palabras de su lengua (que no es la mía). Me centraré en el nivel intelectual de la clase política española, especialmente en la conservadora, la de los colegios de curas y demanda de enseñanza bilingüe (¡¡en inglés, por supuesto!!)… ¡vaya derecha!… si mi abuelo – el de la Derecha Regional Valenciana-CEDA levantara la cabeza… – La superación de las tensiones sociales europeas tras la segunda guerra mundial se hizo a través de un acuerdo tácito por el cual la derecha aportaba su creación (la cultura europea fundamental es burguesa) desprendiéndose de su elitismo y la izquierda aportaba su capacidad de distribución de la misma entre las clases subalternas. La derecha española, claro, quedó al margen, no sólo porque el franquismo imperaba en el Estado sino porque nada tenía que aportar.

    Pasadas las décadas, con una generación completa conservadora criada en un sistema monárquico liberal burgués (¡qué más quieren!), su erial cultural sigue tan yermo como en 1945. No sólo ignoran qué significa la palabra “talante” es que siguen estando en el furgón de cola de la inteligencia aplicada a la creación inmaterial, a la cultura. Tal vez la foto del sr. Rajoy con la que se encabeza este “post” tiene algo de simbólico: él, don Mariano, el rostro electoral conservador, aparece en primer plano, nítido y bobo; tras él, la catedral de Santiago, epítome del patrimonio cultural, de la cultura, está desdibujada, presente sí, pero con harto esfuerzo es reconocida; sabemos lo que es porque la adivinamos, no porque la apreciemos.

    A la postre, la elaboración y la relación que un partido político establece con la cultura nos da su talante – ¡cáspita, la palabreja de nuevo! – a la hora de enfrentarse a su misión social. Es como un chivato que delata a los torpes. No es una cuestión de cantidad, lo es de calidad y ahí se aprecia, realmente, el interés que ese partido muestra por la “res publica”. En el caso del PP (FAES), salvo cultura cerúlea de parroquia católica de postguerra civil, yo, qué quieren que les diga, no la veo por ninguna parte. Todo lo más, en las comunidades autónomas donde gobierna, hay simulacros de cultura y cultura como espectáculo, eso es todo: algo evanescente, fútil, irrelevante. Al revés, lo que se aprecia, en su relación con la sociedad, es, como nos recordaba don Miguel, la actitud de la sra. Aguirre cuando se descubre el embuste reiterado a la ciudadanía, el alarmismo concreto del caso y la mala práctica política en el asunto del hospital de Leganés; o el mirar a otra parte cuando su recurso contra la Ley de Paridad de Género se queda en agua de borrajas; o las triquiñuelas legales del imputado presidente de la Diputación de Castelló, inefable Fabra de rancia tradición caciquil, para esquivar los tribunales; o las contradicciones lacerantes del presidente autonómico valenciano, M.H. sr, Camps, brindando con agua desalada (por el PP) y quejándose del agua desalada (por el PSOE). Lo cual también está presente en sus relaciones internas como partido, desde las defenestraciones de los srs. Piqué y Gallardón a las amenazas patibularias al líder de Nuevas Generaciones de la provincia de Valencia por parte de sus conmilitones más dados a la misa dominical y el consejo del confesor.

    Esa es la concreción práctica de la política del PP hoy, eso es lo que destila su carencia de base cultural, ello, lo que delata no saber qué significa “talante”… qué cosas…

  10. Sigo suscribiendo los acertados y acerados, aunque también comedidos, comentarios de Kantarell. Sólo diré, y no por temor al inefable Paco o a su defensor don Lázaro (que quizás cambiase de criterio si el mozo que se esconde tras el nick se confesase de modo más explícito, porque creo que es un fascista aunténtico), que si bien no apruebo la maledicencia implícita en el comentario de la no menos grácil Markova, el análisis fisiognómico del nuevo profeta del conservadurismo más rancio (quien ha citado a Romanones es su mentor Aznar), me hace pensar en el viejo adagio italiano: «Se non è vero è ben’trovato». Algo habrá intuído la diva ante los pies planos y las actitudes del lidereso.

  11. Y QUE CONSTE QUE APRECIO LOS ESFUERZOS «CIENTÍFICOS» DE MI QUERIDO FUSTER POR ANALIZAR AL PERSONAJE, PERO MIREN… LO ÚNICO QUE ME INSPIRAN ESTOS SEÑORES, LAMELA Y GÜEMES, AGUIRRE INCLUIDOS, QUE SON TODO UN «MODELO», ES MELANCOLÍA, FLASH BACK AMARGO, SOBRE TODO CUANDO HE PODIDO VER ALGUNAS DE LAS FOTOGRAFÍAS INÉDITAS DE KAPA DESCUBIERTAS EN MÉXICO, O LA TERRIBLE EXPRESIÓN DE ANGUSTIA SERENA DEL CONDENADO A MUERTE POR FRANCO EN EL 39, DESCUBIERTO POR CASUALIDAD EN LA TV ANTES DE SER FUSILADO CONTRA LA TAPIA DEL CEMENTERIO DE SU PUEBLO —EN UNA ENTREVISTA DE CNN+ CON MI AMIGO MARCOS ANA, PARA MÁS INRI— POR EL CIUDADANO MILLÁN, SU HIJO YA SETENTÓN, UN PUEBLO CUALQUIERA DEL LLANO DE CASTILLA… O DEL CASTELLÓN DE FABRA, O EL ALTO DE LOS LEONES DE AGUIRRE… O…. ¿ACTUARÍAN DEL MISMO MODO LOS ACTUALES DIRIGENTES DEL PP SI TUVIERAN LA OPORTUNIDAD? DEJEMOS EL METALENGUAJE UNIVERSITARIO O DE DEBATE EDUCADO PARA LLAMAR LAS COSAS POR SU NOMBRE, COMO LAS LLAMA EL BASTO PACO.

  12. ¡Mejor ejemplo, imposible!. En el diario “Liante”, uy, perdó, “Levante” de hoy mismo escribe un artículo de opinión el Honorable Sr. don Fernando de Rosa, Conseller de Justícia i d’Administració Pública de la Generalitat Valenciana. Obviamente, miembro de un gobierno “popular”. No entraré en su contenido – todo un despliegue de ignorancia sobre lo que es el Estado de Derecho, el “habeas corpus”, la presunción de inocencia y el papel de la fiscalía y los jueces a la par que una hábil combinación de churras con merinas – no, no viene al caso… pero sí su titular: “Ante la violencia no puede haber talante”. ¡Magnífico! ¿Vieron?… lo dicho “up supra”: ni puñetera idea de lo qué significa “talante”… y es nuestro pequeño ministro de justicia. Si este Conseller presenta, explícitamente, tal perfil de mentecato. ¡por Hércules! ¿cómo serán sus colaboradores de menor rango y mayor influencia? ¿qué tratamiento legislativo reciben nuestras leyes?… Pues eso, ni el léxico castellano conocen.

  13. NO SÉ POR QUÉ TENEMOS QUE HABLAR CON MAYÚSCULAS, EN VOZ ALTA. ENTIENDO LA IRRITACIÓN ACTUAL Y RETRSOPECTIVA DE MIGUEL VEYRAT, PERO NO VEO QUÉ PODEMOS GANAR SI AQUÍ ABANDONAMOS «EL METALENGUAJE UNIVERSITARIO O DE DEBATE EDUCADO» PARA RECAER EN LAS FORMAS DEL «BASTO PACO».

  14. Pues sí, es posible. Lo siento, Justo, a veces me puede el mal genio. No quería ser maleducado.

  15. Bueno, Bueno, Sr. Veyrat ya va tocando tierra. Sosieguese, deje el VSOP y no me tilde de fascista, más bien anarquista.

    Un saludo.

  16. Esta mañana he visitado una exposición del CCCB (Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona), titulada «En Transición». Pués bién, nada más entrar en el recinto ha comenzado la tensión.
    Pido permiso para pasar al interior y me dicen que tengo que sacar entrada. Les digo que me niego en rotundo a pagar, y de manera socarrona que por ser «actor y figurante» . Les digo que tengo que entrar gratis y ¿»qué manera hay de conseguirlo».
    Que si por edad, no es posible, que si por carecer de la tarjeta Rosa, -la que dan a los jubilados con baja pensión-, tampoco; en fín, tras la pregunta de si tengo la tarjeta de la red de Blibiotecas de la Diputación, ¡¡albricias! lo conseguí. Paso.

    He aquí la perla que me encuentro: «La exposición que aquí empieza es uno de los relatos posibles sobre la transición española: La crónica de los ciudadanos que la protagonizaron y no el de las élites políticas que la han monopolizado.
    Esta propuesta prescinde de los testimonios actuales sobre aquellos años para confrontarnos con la manera de hacer del momento: Entusiasta y dolorosa, con voluntad de cambio, sin saber sus límites.
    Nos adentramos en un período donde topan un Estado viejo, incapaz y desconcertado que mantiene como principal valor la violencia de una oposición creciente, agente de cambios y de modernización.

    Aparece el país que vió morir a Franco en la cama y que hace morir a la dictadura en la calle.
    Aparece el país en transición».
    ******************************************************************
    En la última frase adivino la verdadera faz del encubridor Celestino.

    Se intenta con la exposición de que no se mire para atrás, pero sobre todo que son las nuevas generaciones que no vivieron la dictadura las que han de vivir el «presente».
    Es decir más monarquía con D. Felipe, más Partitocracia y más desarrollo sin responsabilidad hasta el desastre final.

  17. Siento haberle malinterpretado. Cambiando de tercio, lo del Sr. Rajoy (que tiene cara de panoli) esta muy manido.
    Desde mi humilde posición y disculpen por mi atrevimiento me gustaría invitar al Sr. Serna ha que hiciera un análisis sobre los «400 euros» del Sr. Rodríguez Zapatero. A día de hoy, ya no se, si libraran un cheque, si me lo descontarán en la declaración, si me bajan el IRPF o si al final todo se quedará en un brindis al sol.
    Por otra parte, ¿no sería más adecuado, utilizar el superávit en Sanidad, Educación, Ley de Dependencia, transporte público, obras públicas (para que llegue antes el AVE a Valencia),etc…? ¿No sería así más progresista?.

  18. Gracias, doña Hemeroteca, por el “link” del artículo del que hablaba.

    Desde luego, sr. Moreno, vaya racha llevamos con las exposiciones barcelonesas… No sé los demás, pero yo le estoy muy agradecido por tenernos al tanto de esas novedades ribeteadas con los apuntes personales que nos hace de su propia experiencia y que le dan una perspectiva más tangible a lo que, al final, sólo son pirotecnias culturales para lucimiento de políticos, pesebre de vividores de la cultura y adocenamiento público.

    Don Lázaro, sabe que no soy de entrometerme en cuestiones entre dos contertulios, salvo que afecten al conjunto, claro, y ahora mismo, aunque se dirige ud. a don Justo – y quedando yo, obviamente, a expensas de lo que él pueda opinar, que para eso es el “magíster” del “blog” – ¿no le parece, ya no desviarnos algo del tema (un vicio muy extendido en este “blog” y que yo mismo practico con fruición) sino que lo que nos propone es hablar de otra cosa?

    No seré yo quien vaya ahora a salir en defensa del presidente Rodríguez – tampoco es ningún secreto mi actitud crítica, incluso ácida, sobre el citado sr. – pero ¿no le parece que sería mejor dejarlo para otra ocasión y centrarnos en el candidato que, siendo quien más oportunidad tiene de desbancar al primero, ha estado más a cubierto de la luz y taquígrafos de los medios? Don Mariano, si recuerda, siempre ha estado orlado por una pléyade de “chupadores de imagen” (los srs. Aceves, Zaplana, Gallardón, el propio Aznar, incluso Rato y hasta, a última hora, Pizarro) que han nimbado a quien debería haber sido el protagonista central de la oposición al actual gobierno? ¿por qué ocurre eso? ¿acaso se teme algo de él, de su imagen, de sus gestos, de su actitud – su talante – de sus palabras?… y si nada se teme ¿a qué el arcano del sr. Rajoy?… centrémonos en él y reservemos a don José Luís para mejor momento.

    PSE (Post scriptum etílico): el del VSOP soy yo, no don Miguel.

  19. Hay en España 1.679.802 personas del régimen general de la seguridad social que cobran menos de 1.000 €.
    El que esto escribe tiene 1.794.32€ brutos al mes.
    La mayoría de los primeros nunca cojerán el AVE ni el tren del desarrollo de los nuevos ricos españoles.

    Que conste que nunca he votado al PSOE, no lo voto en la próxima, ni lo votaré en las venideras.

    Y creo que no votaré hasta que : Se convoque un referéndum vinculante sobre la forma de Estado y si sale monarquía seguiré sin votar hasta el juicio final en la Galaxia de Andrómeda. Mientras tanto seguiré de espectador crítico recalcitrante.

  20. PSE: Mi organismo de pensionista de avanzada edad ya no admite mucho VSOP, Kant. Es rioja. Y me sienta bien. Los gritos no son tales, sino pereza de corregir un texto que salió después de pulsar la tecla de mayúsculas inadvertidamente y escojo seguir adelante. Mi solidaridad con Moreno: La prejubilación aznariana y la norma de los «últimos 15 años» en lugar de la cotización de toda la vida, me dio un mordisco importante a mi pensión. Ahora pretenden lo contrario, que trabajemos más, pero el mal ya estuvo hecho. Primero degradaron a todo el que olía a azufre en las instituciones públicas para quitarle los «pluses» de otro sistema injusto que no aumenta sueldos sino premia «fidelidades», luego prejubilaron a quien no dijo «serviam»: una forma más de limpiar «su» patio y dar los puestos de responsabilidad ganados con el trabajo de toda una vida a sus nuevos jabalíes ansiosos de «pillar».

  21. Costumbre fea alcol, y más VSOP (Very Superior Old Pale) por el tipo de madera con el que haser los barriles los pérfidos ingleses, tamién llamar VSXO (extra old), y no prregunten cómo sé esas cosas que Alá y su profeta condenan grandemente pero qué ricas mescladas con leche de camella para curar resfriados en el desierto bajo jaima acogedora. Lásaro sal fuera no deber usar argumento para descalificar don Mijail que llamar fascista a senior Paco, no a él, anarquista que compartir bandera roja y negra con falangistas espanioles.

  22. Mientras se lo piensan, abundando en ese nefando vicio que señalaba y del que me autoinculpaba y en el que ahora reincido, el de irnos por los cerros de Úbeda, sólo un detalle para aclararle, sr. Veyrat: en su entrada del 29 a las 12’37, respondiendo a la anterior de doña Alicia Markova, la increpaba ud. como rusa. Dado el silencio de la susodicha sra. ante tamaña osadía y sin ánimo de defenderla a ella – ¡faltaría más! le aseguro, doña Alicia, que, vista su actitud, como le dijo Rhett Butler a Scarlett O’Hara en “Lo que el viento se llevó” (1939), lo que le pueda pasar a ud. en este proceloso mundo digital, “francamente, querida, me importa un bledo” – pero sí en aras de la verdad y el lustre de los contertulios, he de decirles que la auténtica Marova se llamaba, en realidad, Marks, Liliana Alicia Marks y era británica, inglesa, por más señas; londinense, por centrarnos.

    Volviendo al tema del “post” ¿alguien puede conseguir una foto de don Mariano junto a sus amiguitos europeos (esos de los que nada quería saber) la sra. Merkel y el sr. Sarkozy? He visto imágenes del evento en un informativo televisivo matutino y me dio un ataque de risa… entiéndanme, no lo insulto, lo describo: ¡qué gazmoño!

    Y, hablando de temas conservadores, ¡vaya racha lleva la economía neocon estadounidense, eh!. Esa misma que quiere aplicar el sr. Pizarro, inspirado por FAES, caso de ganar el sr. Rajoy. El presidente Bush (hijo) ha logrado un record bien particular: la economía de los EEUU no había estado tan mal desde los tiempos… ¡de don Ronaldo Reagan! aquella mente privilegiada de los “neoliberales” (los padres putativos de los actuales “neoconservadores”). Mucho “neo”, mucho “neo”, pero menos el protagonista de “Matrix”, Neo, el resto han sido pasto del fracaso más absoluto para las economías de los Estados, aunque, innegablemente, del éxito más absoluto para el enriquecimiento de los particulares con menos escrúpulos humanos y ética empresarial. ¿Es eso lo que quiere don Mariano para España?

    Vaya, vaya, se cumplen aquellos denostados (por inverosímiles) principios de análisis económico marxista (que, por cierto, comparten y corrigen para abundar, Keynes y Galbraigth): un sistema capitalista desregulado, como el promovido por los “neos”, pervierte el propio sistema de mercado, deriva su libertad en relaciones oligopólicas, cuando no monopólicas, y con ello destruye las rentas medias – y las más débiles, como las de los pensionistas, como apuntaban los srs. Moreno y Veyrat – polarizando la sociedad entre pobres, que cada vez son más y más pobres, y ricos, estos cada vez menos pero más ricos, consiguiendo, al final, un sistema cíclico de crisis que destruyen empleo, sueldos y calidad de vida… sssstupendo futuro nos presentan los cerebritos económicos del PP…

  23. Otra de las perlas que me encuentro en la exposición del CCCB:

    «Compréndase que instintos y sentido moral se hallan al mismo nivel de la inteligencia. Cierto es que algunos imbéciles parecen sociables y de buena voluntad, e incluso muestran algo de cariño hacia parientes y amigos, pero es mucho más común en ellos un alma viciosa y pervertida.»

    Este espécimen fue el primer catedrático de psiquiatría de España. También uno de los mayores «intelectuales» del régimen franquista.
    Si llega a saber que en España, a los homosexuales se les legalizaría su unión, al finalizar la guerra civil fusila a todos los vencidos.

  24. Bueno, verá usted,amigo Kant, en cuestiones de ballet no soy «ducho» como diría la rusa auténtica, la grácil; me alegro que Mistress Mark-Markova sea británica como mi actual compañera, están siempre bien informados y tienen sentido del humor, aparte de lo acertado de la intuición que nos transmitió del «cenizo» (como le llaman hoy los «medios») entre las brumas de un parque y al acecho. Y de eso los ingleses saben bastante. Pesiatal y a Paco. ¡Ah! el lumbreras sólo puede ser un mal valenciano llamado López-Ibor.

  25. Aunque bien pensado, otro psiquíatra, también del Opus, y que dejó «saga» represora como los Lópeces Ibores, que aún actúan, fue Vallejo-Nájera, cuyo descendiente es uno de los protagonistas de la «salsa rosa» actual, compañero de una tal Paulina Rubio, al parecer.

  26. Aj, documentao don Miguel, a pesar de rioja, rico rico rico. En desierto, a majaras tratarlos muy bien, ser santos, llenos de espíritu benéfico. A mí pareser seniso también sidi Rajay.

  27. El primer catedrático de psiquiatría en España (Universidad de Barcelona 1933, mala fecha para cualquier cosa) fue, Emilio Mira y López; lo que ocurre es que no se le solía mencionar por su izquierdismo militante y por su exilio consecuente y, si se hacía, era para denigrarle, claro. Así se considera en nuestro país como el primero al que lo fue de de la Universidad de Salamanca y más famoso entre nosotros por múltiples cuestiones: Juan José López Ibor, (véase el morboso libro «Vida sexual sana», que guió a muchos matrimonios de la época franquista y su costumbre de apaciguar a los enfermos violentos por medio del electro-choc, es decir, dejándolos descerebrados). También Antonio Vallejo-Nájera se autodenominaba primer catedrático de psiquiatría en España y lo fue en la Universidad de Madrid desde 1947. Véase también su libro «Locos egregios» y la explicación que da al talento de Mozart.
    Esa perla que nos trasmite J Moreno tiene que ser de alguno de los dos que he citado en segundo y tercer lugar.

  28. Siguiendo fuera del tema que nos ocupa, como ya es costumbre (perdón), puntualizo con una curiosidad: En la ópera «La flauta mágica», de Mozart, hay un aria de endiablada dificultad, la de a Reina de la Noche, para soprano coloratura, que es muy breve. La Reina de la Noche no vuelve a aparecer en toda la ópera. Según Vallejo Nájera en sus Locos egregios, sólo un loco infrautiliza de ese modo a una cantante que ha de ser portentosa para poder con ese aria. Mozart escribió ese papel para su cuñada, que estaba a punto de dar a luz y lo hizo breve por si había nacido ya la criatura en el momento del estreno, poderla suprimir y, para si no había nacido, que no supusiera demasiado esfuerzo para una embarazada. Ésto es conocido por cualquier aficionado, pero al Señor Vallejo Nájera no se le ocurrió documentarse ni un poquito para escribir su libro (anda que Mozart no tiene cosas en su vida como para documentar un desequilibrio sin recurrir al absurdo del aria de la Reina). Parece que su frivolidad era de éste cariz en todas sus actividades.

  29. ¡¡Menudos autores, me citan, sra. Pavlova, sr. Veyrat!!… ¡¡¡¡ Y menudo título cita en concreto, doña Ana!!!!…

    Los drs. López Ibor y Vallejo Nájera (¿por qué se les citará siempre por sus dos apellidos?) me recuerdan a Hernández y Fernández (“Dupont et Dupont”) pero en ominoso. En cuanto a “El libro de la vida sexual” !!… ¡¡por favor!!… es la biblia conservadora del sexo (especialmente recomendado en parroquias para “matrimonios bien” y en lupanares de frustrados). Libro de cabecera de lo más florido del ramillete social español y su clase dirigente. Con ese libro, señora, no sólo nos da para hacer un “post” monográfico, podríamos hacer un “blog” entero con sus contenidos, sin duda morbosos, delirantes y con unas aberraciones científicas que no se sabe qué causa más estupor, si que alguien lo escribiera o que alguien lo creyese.

    ¡Sapristi! y volvemos a encontrarnos a la derecha española como compendio de ignorancias…

  30. Sí perdonad pero se me olvidó decir el nombre del insigne «médico» español.
    Fue el padre de la dinastía: Antonio Vallejo-Nájera.
    El google registra 11.000 entradas del sujeto. La de la enciclopedia Wikipedia tiene un historial limpio del mismo. ¡Vamos que le han hecho una semblanza escueta y castrense. Seguramente registrada por sus camaradas.

  31. Sí, es que, además, Vallejo Nájera «también» pintaba. Era pintor naif, decía él, y habrá muchas entradas por eso, pero el historial de López Ibor… Sabrá usted, Señor Kant, que el suyo sobre sexo era uno de los libros más vendidos durante el franquismo, con más reediciones y regalo obligado en bodas «bien». Parece ser que era de lo más morboso y sucio que darse pueda y ya sabemos que de los médicos famosos se sabe el error o los errores que hayan cometido; que todo el mundo cuenta el fallo y nadie menciona los miles de éxitos, pero es que López Ibor parece ser que era prácticamente un asesino, pero tenía todas las bediciones del franquismo. Hoy se destroza la vida de personas como Luis Montes, que hizo más digna la muerte de enfermos terminales y, pese a una sentencia judicial a su favor, la derecha sigue erre que erre en su descalificación, como ocurrió ayer, no sé si lo verían, en el programa televisivo 59 segundos, donde se vertieron sobre él calificativos que espero que lleve a los tribunales, pero López Ibor campó inpune por décadas de nuestra analfabeta España de pos guerra.

    Sea la disciplina que sea sobre la que se hable, se llega a lo mismo. Un horror, un espanto, pero los «rojos», seguimos siedo críticos y custionándonos todo. Así nos va.

    Insisto, para terminar: el primer catedrático de psicología en España fue Emilio Mira http://es.wikipedia.org/wiki/Emilio_Mira_y_L%C3%B3pez

  32. Benimamel no era mi intención descalificar al Sr. Veyrat, con mi comentario. Alguna vez el Sr. Veyrat ha comentado sus brindis. Yo también lo suelo hacer, pero con una ligera diferencia, suelo darme homenajes con cerveza «El Aguila».

  33. Servesa engordal, Sidi Lásaro, no bebel sino leche de camella buena buena, con VSOP.

  34. Extraordinariamente interesante la discusión que ustedes han mantenido hoy. Me perdonarán por no haber intervenido, pero numerosas tareas que se me han acumulado –académicas y domésticas– me han impedido centrarme. Nuevamente he perdido el fuelle. Por eso, debo retrasar hasta mañana a mediodía la publicación del nuevo post. Les agradezco que usen este blog al margen de que yo intervenga o no…

  35. Me parece que deberíamos decirle a Justo todos que haga el favor de no agobiarse ¿No les parece? Sé que estamos de acuerdo en que no debe tomarse el blog como una obligación, cosa que puede llegar a hacérselo odioso. Le noto ansioso y eso es muy malo.

    No hay ninguna prisa, Justo. ¿No ve que hasta seguimos escribiendo en entradas anteriores, después de poner la nueva? Incotinencia verbal y escrita confesa padecemos dos: Kant y yo y, aunque nuestras elucubraciones sean mucho menos interesantes que sus propuestas (me refiero, fundamentalmente a las mías), vamos pasando el rato hasta que usted pueda. De verdad: no se nos agobie que acabará poniéndose malo y eso es mucho peor.

    Yo, como pelota oficial del blog se lo digo, pero estoy segura de que hay unanimidad (seguro que hasta Paco está de acuerdo, que así descansa de sus elaboradas intervenciones).

    Gracias y ¡¡cuídese!!

  36. Leche de camella tamién para don Iusto, con gotitas de brandy de Jerés. Mano de Almurabitím.

  37. Me sumo por completo a las palabras de la sra. Pavlova: nada de agobios, don Justo, ya nos agobian – o eso tratan – los obispos como para que, encima, nos impongamos nosotros otras penitencias.

    Los obispos… ¿se dieron cuenta? Ya no se dice «la Iglesia», «los curas», «los cristianos»… no, en esta legislatura también se ha generalizado esa expresión que, hasta dentro del mundo católico (y hasta allí tengo yo amigos), deriva rápidamente hacia lo despectivo… «los obispos».

    Recuerdo ahora a una frase de un amigo común de don Justo y mío (no lo cito por su nombre por su natural timidez): «nadie como Wojtyla ha hecho más por el ateísmo en este mundo». Pues a estos obispos españoles les pasa lo mismo pero a nivel provinciano: tratan de darle marcha atrás al reloj de la vida y eso encrespa hasta a los suyos.

    Y ya que estamos en ello… ¿alguien sabe si en su última soflama contra la laicidad y contra el voto que suponga el libre criterio y razón se aludía al divorcio? Es que todo es oír aquello de «no votarás a quien negocie con terroristas» (o sea, no votarás al PP), «no votarás a quien defienda la ley del aborto» (o sea, no votarás al PP), «no votarás a quien defienda el matrimonio homosexual» (y el PP sólo quiere cambiarle el nombre, pero no el hecho, o sea, no votarás al PP)… en cambio, no he oído nada del divorcio, ¿acaso los obispos españoles ya dan el caso por perdido o es que los medios afines al PP han decidido no airear este incomodísimo punto para tanto conservador de comunicón diaria?… Y don Mariano con esa cara…

  38. Perdón, quise decir «de comunión diaria» no de «comunicón» que por más graciosa que sea la palabra no quiere decir nada en esa frase.

Deja un comentario